Entre los trabajos se contempla la mejora de la accesibilidad para personas con movilidad reducida, un parque infantil, la implantación de alumbrado mediante farolas solares y la creación de un espacio para la plantación de plantas aromáticas, entre otros
El Ayuntamiento de Dalías apuesta cada vez más por espacios accesibles para todos los vecinos, eliminando las barreras para personas con movilidad reducida y, por ello, ya han comenzado los trabajos para la adecuación del Arroyo de Celín. «Este es un entorno que merecemos disfrutar todos y, por ello, facilitar la entrada a cualquier persona era una de nuestras prioridades. Debe estar al alcance y disfrute de cualquier vecino que lo desee», asegura el alcalde de Dalías, Francisco Giménez.
Así, dentro del proyecto se recogen también otras actuaciones muy importantes para el municipio y sus vecinos, como es la creación de un parque infantil accesible con juegos para niños y una tirolina, nuevo alumbrado público mediante farolas solares, teniendo en cuenta el ahorro hídrico, y un huerto para la plantación de plantas aromáticas. «Con esta actuación se pretende mejorar la calidad de los espacios naturales en los que se desarrolla la actividad pública de ocio y turística, dotándolos de material o equipamiento, así como a las zonas recreativas, paisajísticas o naturales de interés turístico; poniendo en valor un espacio con gran potencial medioambiental y turístico y teniendo en cuenta el paraje de gran valor etnológico en el que se sitúa», apostilla el primer edil.
Desarrollo de la actuación.
En primer lugar, se actuará sobre el pavimento deteriorado por el transcurso del tiempo, utilizando materiales existentes en el entorno, de forma que los senderos sean accesibles, eliminado los resaltos existentes, así como la falta de compactación del mismo, esta intervención se realizará tanto desde el acceso norte como desde el acceso sur a dicho espacio.
Actualmente, por la zona norte acceden vehículos de forma eventual y extraordinaria; por lo que se intervendrá en dicha zona con la finalidad de que pueda entrar un vehículo de forma provisional para dejar a personas con capacidad o movilidad reducida.
Desde el acceso norte se accederá a la zona abancalada con uso de huerto, así como a la zona de juegos. Desde el acceso sur se llegará a la zona del bar y se hará accesible a una de las zonas abancaladas de uso merendero.
El resto de intervenciones consisten en la colocación del siguiente mobiliario:
– Juego de niños; con una tirolina y un columpio doble de madera accesible.
– Dotación de bancos accesibles, así como señalización.
– Huerto urbano con sistema de riego por goteo.
– Dotación de alumbrado público mediante farolas de iluminación led de energía solar fotovoltaica; y con sensor crepuscular y de movimiento.
«En todo momento se ha pretendido que la intervención sea lo menos dañina posible con el medio y lo más minimalista posible, recuperando materiales y elementos del lugar. Por eso nos parecen tan importantes las referencias del lugar; el paisaje, el clima, la madera y el agua», resalta Francisco Giménez.
Una actuación que ha sido solicitada y aprobada a través de los fondos europeos FEDER con un presupuesto de cerca de 50000 euros.